Sobre el proyecto
Las factorías del conocimiento son un espacio para el desarrollo desde la participación activa de los territorios y las personas, un proyecto llevado a cabo en el marco de potenciar en la juventud el interés por construir sus proyectos de vida. Esto implicó procesos formativos desde la teoría a la práctica, modelo de economía, acompañamiento a emprededores y creación de redes efectivas.
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Desarrollo y consolidación de las Factorías del Conocimiento integradas por 93 jóvenes, 51 jóvenes por parte de CII-ASDENIC y 42 jóvenes por parte de Fundación Desarrollo y Ciudadanía.
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Se realizaron ensayos para el cultivo de fresa, prácicas de monitoreo de los caudales y fuentes de agua, así como el monitoreo de las variables climáticas de las comunidades seleccionadas.
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Se establecieron parcelas de frijol y un comité de agua potable y saneamiento; se desarrollaron dos empresas de biofertilizantes además de experimentaciones en el cultivo de pitahaya y tomate cherry.
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Ferias sobre seguridad alimentaria y encuentros con la universidad UNAN-Jinotega. Además, se realizaron actividades para niños, maestros y mujeres sobre el uso de herramientas agroecológicas con huertos comunitarios y charlas a productores.
Puntos fuertes del proyecto
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Impacto de género
- Se ha impulsado el desarrollo personal de las mujeres campesinas, y que actualmente ellas son dueñas de la tierra donde lideran procesos productivos no tradicionales (cultivan fresas).
- Se han involucrado un 33 % de jóvenes mujeres, en la Factoría del Conocimiento rural. Las jóvenes se han apropiado de las metodologías y están impulsando con mucho entusiasmo sus emprendimientos productivos en el cultivo de fresas. Esto ha permitido, que no salgan a realizar trabajos domésticos o en otras fincas, obteniendo ingresos con la producción en sus parcelas, contribuyendo a la Seguridad Alimentaria de sus familias. Es evidente el liderazgo que tienen las mujeres en la comunidad de Buena Vista, ellas motivan al grupo y participan activamente en cada una de las actividades, estando en constante aprendizaje y fortaleciendo su desarrollo personal. Además, no solo las jóvenes que forman parte del proyecto se involucran de las actividades, sino que también sus madres, tías, sobrinas, hijos e hijas.
- El traspaso generacional a las jóvenes, es impulsado por las mismas mujeres emprendedoras; donde el roll de las jóvenes se encamina apoyar para hacer crecer el negocio desde la contabilidad, las estrategias de publicidad y venta. Y por otra parte, están encargadas de registrar a través de un diagnostico participativo, los recursos naturales de su comunidad para velar por la planificación y programación comunitaria.
- La finca modelo ha sido un espacio donde las mujeres campesinas dueñas de huertos, se han capacitado en diferentes temas agroecológicos. Mujeres que hoy en día ya participan en mercados y ferias locales con la venta de los productos excedentes del huerto.
- A nivel comunitario las mujeres que siempre han estado en sus actividades domésticas, con esta intervención fueron parte de las acciones tomadas para poder desarrollar esta iniciativa de proyecto como los monitoreos de calidad y caudales fueron llevados por mujeres en el caso del Bramadero. Despertando el interés de la comunidad ante un conocimiento nuevo como es el de saber las riquezas de recursos hídricos en sus comunidades y su correcta explotación de manera racional para poder mitigar un poco y adaptarse al cambio climático en sus regiones.
